Para todos los amantes de Japón, su cultura y todo lo que rodea al
país asiático, los cerezos en flor japoneses, conocidos como
Sakuras, son una de las cosas que más nos gustan y es que solo con
ver una foto de uno de estos árboles en época de floración ya nos
deja con la boca abierta.
En
Japón cada primavera la floración de los cerezos es la fiesta más
simbólica de la cultura japonesa. Lo que casi nadie sabe es que si
hoy sigue vivo ese patrimonio de la humanidad es gracias a
Collingwood Ingram, un inglés cuya pasión lo llevó a viajar a
Japón.
Siendo
como son, un tesoro nacional, cuesta creer que los cerezos padecieran
épocas de descuido y que esto provocara la desaparición de muchas
variedades y la prevalencia de un único tipo de cerezo. Es aún más
increíble enterarse de que esto fue gracias un extranjero, un
horticultor británico quien ayudó a frenar su desaparición.
Después
de su primer viaje a Japón en el que inicialmente estaba interesado
en la ornitología, Ingram volvió enamorado de la horticultura.
Cuando después de unos años, en 1926 volvió a Japón, descubrió
alarmado que debido a la occidentalización y la modernización del
país, se estaba apostando por mantener solo una variedad de cerezos
en flor. Desde ese momento dedicó su vida a salvaguardar y proteger
la tradición de los sakuras hasta el final de sus días. Después
de muchos intentos, largos estudios y luchando contra el clima,
Ingram consiguió repatriar variedades extintas e introducirlas en
Japón de nuevo. Esta es también la razón por la que por las
calles británicas puedes encontrar variedades de cerezo como si
estuvieses en tierras niponas.
Desgraciadamente,
según los estudios la mayoría de los cerezos en Japón siguen
perteneciendo a la variedad somei yoshino y, si se quiere
admirar otras, hay que buscarlas. Algunas, por desgracia, han
desaparecido por completo.
Si
algo está claro es que tanto los japoneses como los que vivimos en
otros países tenemos mucho que agradecer a Collingwood Ingram por
poder disfrutar en pleno siglo XXI de esta maravilla.
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